Curry de albóndigas de pavo
Traigo esta receta para los amantes de las albóndigas en todas sus presentaciones!, yo soy una fan absoluta, y estas albóndigas de pavo con curry estaban desde hace meses en mi to-do-list y estoy demasiado feliz de finalmente haberme organizado para hacerlas y WOW! qué ricas son!
La verdad es que le di muchas largas innecesariamente, no son nada complicadas y quedan deliciosas. Es de esas comidas con las que puedes sorprender a cualquiera sin mucho esfuerzo y sobre todo sin riesgos: no puede salir mal, no hay ningún paso en el proceso que sea “difícil”.
Si eres de los Airfryer-Lovers que hay por ahí, me imagino que será más fácil todavía hacerlo, porque la única parte que resulta un poco tediosa es freír las albóndigas (sellarlas, más que freírlas) porque salta aceite y no te voy a negar, es un fastidio limpiar después. Pero por suerte el resto del proceso es demasiado sencillo y compensa ese ratito de intensidad.
La Sazón
Yo mantuve las albóndigas de pavo bien simples, la mezcla sólo tiene comino, sal, pimienta y pan rallado… De hecho Augusto comió unas que no tenían curry. La idea es que el curry se destaque.
El “curry” -y lo pongo entre comillas porque no soy ninguna experta en el tema- lo hice con dos tipos: en polvo y en pasta. Varias veces he utilizado la mezcla de ambos porque creo que a pesar de que ambos son currys, tienen distintos aportes al plato.
El curry en polvo es tremendamente aromático, imposible no notarlo. Además tiene un color muy lindo que vamos a reforzar con un poco de cúrcuma adicional.
El curry en pasta tiene en cambio más presencia en el sabor, pica un poco y puedes ponerle más o menos en función de qué tanto te guste el picante. Siempre recuerda que la leche de coco aporta dulzura y mitiga un poco el impacto del curry.
En la tienditas de Amazon te dejo los que yo uso, versión polvo y pasta.
A mi me gusta el picante, pero estoy lejos de ser una experta en la materia. Mi tolerancia es baja en comparación con cualquier verdadero “amante” del picante… me gusta cuando a pesar de que pique puedes seguir saboreando los demás ingredientes; no me anima tanto cuando anula los demás sabores o se convierte en un sufrimiento. Te cuento esto para que tengas un contexto de la cantidad de picante que presento en esta receta. Si tuviésemos una escala del 1 al 10 yo estaría entre 3 y 4 como máximo de tolerancia. Este curry sería un 2.
En este enlace te dejo otras recetas con curry, por si quieres probar y te juro que todas son deliciosas.
Cocinar las albóndigas de pavo
Uno de los temas de hacer albóndigas es cómo cocinarlas, después de haberlas dorado hay que asegurar que están bien cocidas por dentro, sobre todo si son de pavo, pollo, etc.
Aquí me aseguré con dos pasos, aunque creo que puedes prescindir de uno si no quieres ensuciar de más.
Primero las sellé en aceite de oliva, asegurando que quedaran lo más doraditas posible por todos sus lados.
Luego las llevé al horno mientras preparaba el curry. Este paso puedes saltártelo aunque como igual hay que sacarlas de la olla no cuesta nada hacerlo. Los puse en una fuente de horno y aproveché la espera para que siguieran cocinándosela un ratito más.
Por último las regresamos a la olla, esta vez tapadas con el curry cocinándose. Se terminan de cocinar con este “hervor” que además ayuda a que no queden secas.
Para servir
Yo usé arroz jazmín que tiene un olor que lo posiciona como mi arroz preferido -si, incluso puede gustarme más que el basmati, aunque este también quedaría perfecto.
Es fundamental algunos “adornos” que son más aportes de texturas y sabor que estéticos: la parte verde de un cebollín picada diagonalmente, unos gajos de limón, cilantro picado… son ideas para dar una frescura que contrasta muy bien con lo picante y complejo del curry.
También podrías usar ají rojo picado finito, para hacerlo más picante si te gusta. Yo no tenía, pero creo que además de verse muy bien por el contraste de colores sería una capa interesante de sabor, así que procuraré ponerle la próxima vez.
Curry de albóndigas de pavo
Plato: PRINCIPALCocina: INDIADificultad: MEDIO4
servings10
minutos20
minutos300
kcalIngredientes
400g de pavo molido
2 cdtas de comino
2 cdas de pan rallado (o harina de maíz, yo usé harina P.A.N.)
Sal y pimienta
Aceite de oliva
1 cebollín (parte blanca picada en cubitos y la verde en diagonal)
1 cdta de ajo molido
1 cda de jengibre rallado
1 cda de pasta de tomate
1/4 taza de passata de tomate
1 cda de curry en pasta
1 cda de curry en polvo
1 cda de cúrcuma molida
400ml de leche de coco
Cilantro, para servir
Limón, para servir
Instrucciones
- Precalentamos el horno a 200ºC.
- Mezclamos el pavo, comino, pan rallado y sazonamos con sal y pimienta al gusto. Hacemos bolitas de unos 3cm de diámetro y las sellamos en aceite de oliva en una olla a fuego medio alto. Reservamos en una fuente y llevamos al horno mientras preparamos el curry.
- En la misma sartén (con un poco más de aceite de oliva, si es necesario) sofreímos la parte blanca del cebollín picado en cubitos, el ajo y el jengibre durante 1-2 minutos. Luego incorporamos la pasta de tomate, la passata, los currys y la cúrcuma, revolviendo para activar sus olores y despegar del fondo los restos de pavo. Sumamos la leche de coco y cocinamos a fuego medio revolviendo de vez en cuando por 5 minutos.
- Sumamos las albóndigas de pavo a la olla y tapamos durante 5 minutos más, o hasta estar seguros de que están bien cocidas por dentro. Rematamos con la parte verde del cebollín picada en diagonal, cilantro y servimos con arroz blanco y gajos de limón.
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